Tortícolis congénita: Tratamiento efectivo con fisioterapia

Abr 23, 2024Uncategorized0 Comentarios

Tortícolis congénita: Tratamiento efectivo con fisioterapia

Abr 23, 2024Uncategorized0 Comentarios

La tortícolis congénita es una afección en la que el músculo esternocleidomastoideo (ECM) del cuello del bebé se encuentra acortado o tenso, lo que causa una inclinación o rotación anormal del cuello. En este artículo, exploraremos qué es la tortícolis congénita, sus posibles causas y cómo la fisioterapia puede ser una herramienta efectiva en su tratamiento.

¿Qué es la tortícolis congénita?

La tortícolis congénita es una afección que afecta a los recién nacidos y se caracteriza por una inclinación o rotación anormal del cuello debido a la contracción o acortamiento del músculo esternocleidomastoideo (ECM). Esto puede hacer que el bebé tenga dificultades para girar la cabeza en ambas direcciones y puede causar asimetría facial y del cráneo si no se trata adecuadamente.

Causas de la tortícolis congénita

La tortícolis congénita puede tener diversas causas, que incluyen:

  • Factores genéticos o hereditarios.
  • Posición intrauterina anormal durante el embarazo.
  • Lesiones durante el parto, como presión prolongada en el cuello.
  • Factores ambientales, como la posición prolongada del bebé en una posición que fuerce el cuello.

Cómo puede ayudar la fisioterapia en el tratamiento de la tortícolis congénita

La fisioterapia desempeña un papel crucial en el tratamiento de la tortícolis congénita, ayudando a estirar y fortalecer el músculo ECM y mejorar la movilidad del cuello. Algunas opciones de tratamiento incluyen:

  1. Estiramientos musculares: Un fisioterapeuta especializado en pediatría puede enseñar a los padres técnicas seguras y efectivas de estiramiento del músculo ECM para ayudar a elongar el músculo acortado y mejorar la movilidad del cuello del bebé.
  2. Fortalecimiento muscular: Se pueden prescribir ejercicios específicos para fortalecer los músculos del cuello y promover una alineación adecuada de la cabeza y el cuello. Esto puede ayudar a prevenir la recurrencia de la tortícolis y promover un desarrollo motor saludable.
  3. Posicionamiento adecuado: Un fisioterapeuta puede ofrecer orientación sobre el posicionamiento adecuado del bebé durante la alimentación, el juego y el descanso para promover una movilidad adecuada del cuello y prevenir la recaída de la tortícolis.
  4. Asesoramiento a los padres: Un componente importante del tratamiento de la tortícolis congénita es educar a los padres sobre la afección y proporcionarles estrategias para ayudar a su bebé a alcanzar hitos motores importantes y mejorar su calidad de vida.

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En Fisioterapia Oreka, entendemos lo preocupante que puede ser para los padres enfrentarse a la tortícolis congénita de su bebé y estamos aquí para ofrecer apoyo y tratamiento efectivo. Nuestro equipo de fisioterapeutas pediátricos especializados está comprometido a brindar el cuidado personalizado que tu bebé necesita para superar la tortícolis y alcanzar su máximo potencial. No dudes en ponerte en contacto con nosotros para programar una consulta y explorar cómo podemos ayudarte.